La anemia y la desnutrición en un país “en desarrollo”

Poco avance y mucho retroceso. Así se puede resumir los resultados presentados en la última Encuesta Demográfica y de Salud Familiar (Endes) 2016, presentado recientemente por el Instituto Nacional de Estadística e Informática (Inei) donde se reflejan cifras negativas respecto a la anemia y la desnutrición infantil. 

Las cifras de la Endes 2016, revelaron que el 43,6% de niños menores de 3 años de edad sufren de anemia. Una cifra que se incrementa en 0,1 % pues según la encuesta del 2015, el porcentaje era de 43,5%. Sin embargo la cifra es más complicada si se hace un análisis de los últimos cinco años. En los últimos cinco años, la anemia en este sector poblacional, ha aumentado 2%, al pasar de 41,6% en el 2011, a 43,6% en el 2016.

Los departamentos donde está el índice más alto de anemia, son Puno (75,9%), Loreto (60,7%) y Pasco (60,6%).  Esto sumado a la cifra de desnutrición crónica que es de 13,1% (400 mil niños y niñas), genera preocupación y pone las alertas sobre el funcionamiento de los programas sociales implementados por el Estado.

Las brechas entre el área rural y urbana sigue en aumento, esto se demuestra en los índices de anemia en niños menores de cinco años (zona urbana 30,1% y zona rural 41,4%) y desnutrición crónica infantil (urbana 7,9%  y rural 26,6%). Así mismo no hay mayores avances en la disminución de la desnutrición crónica infantil ya que es solo un 1,3%.

¿QUÉ HA FALLADO? 

El antropólogo Carlos Aramburú, integrante del grupo Impulsor Inversión en la Infancia, considera que es indispensable crear una autoridad visible y responsable para la infancia.

En declaraciones al portal de dicho grupo, Aramburú considera que los resultados son consecuencia de una falta de liderazgo estatal en materia de infancia y para ello, “el Estado debe garantizar la seguridad alimentaria de los niños en el país”. 

El año pasado, en plena campaña electoral, Unicef y la Defensoría del Pueblo presentaron la Agenda Legislativa Pendiente para la niñez y adolescencia (2017-2021) donde estipulaba algunas acciones que el actual congreso debería tener en cuenta. En materia de lucha contra la anemia y la desnutrición infantil, consideraba que se debía “Impulsar y vigilar la aprobación de los lineamientos (elaborados por el Ejecutivo) para la gestión articulada intersectorial e intergubernamental orientada a promover el desarrollo Infantil temprano”. 

Estos lineamientos, recuerda Unicef fueron elaborados por una Comisión Multisectorial, liderada por el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social y conformada por 10 ministerios y por representantes de la Asamblea Nacional de Gobiernos Regionales, de la Red de Municipalidades Urbanas y Rurales, y de la Asociación de Municipalidades del Perú. Dicha comisión elaboró además un Plan de Acciones Integradas para el periodo 2014 – 2016, en el marco de la política de desarrollo e inclusión social. La propuesta de lineamientos fue aprobada por la comisión en su sesión del 4 de junio del 2014 y remitida a la Presidencia del Consejo de Ministros. Parece que nada de eso se ha avanzado, a pesar que existe un programa al 2021, del Ministerio de Salud para enfrentar este mal. 

¿QUÉ TOCA HACER? 
La congresista Gloria Montenegro, presidenta de la comisión de Inclusión Social y Personas con Discapacidad consideró que es importante aplicar una atención integral para la infancia a nivel nacional. 

“Tenemos que aplicar una atención integral para la infancia, de hogar en hogar. Debemos conocer ¿qué edad tiene el niño?, ¿qué le está faltando?, ¿qué atención se le debe dar? Este trabajo tiene que ser de la mano con los gobiernos locales, los cuales deben estar preparados para brindar una atención adecuada a las familias”, afirmó en declaraciones al portal de Inversión en la Infancia.

El mismo medio, también recoge declaraciones del ex presidente de Consejo de Ministros, y director de Otra Mirada, Salomón Lerner quien considera que “todos debemos poder integrar las acciones necesarias para poder solucionar estos problemas que afectan a la infancia. Una solución a estos problemas parte de la buena voluntad y de poner los puntos claros para poder definir los pasos a seguir frente a estos flagelos”.

Lerner también afirmó que se debe hacer un llamado para un trabajo conjunto que enfrente esto. “Esa es la mejor forma de demostrar que sí se pude salir adelante ante estos problemas estructurales que sufre el país”.

Vea la encuesta completa aquí.

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