intelectual

2. 08. 2018

Eduardo González Viaña

Tengo buena razón al llamarlo el último sabio porque lo era. El historiador que desde el futuro observe nuestra época se encontrará con fulgores como éste frente a un centenar de “representantes”, entre los cuales es más fácil que hablar en castellano, hacerlo en idioma becerril.

Eduardo González Viaña